Siempre he considerado que enseñar Project Management en un MBA es una tarea complicada para el profesor, hace algún tiempo escribimos un post sobre ello. Así que esta vez me preparé las clases en el MBA de La Salle desde un nivel con mayor carga organizativa.
“No existe una única forma correcta de gestionar los proyectos”, ésta fue una de la conclusiones de la primera clase que impartí.
Para poder llegar a esta conclusión utilicé el concepto de que un proyecto es una situación caótica que tenemos que abordar y, delante del caos, existen dos enfoques de gestión opuestos:
- Gestionar para ordenar el caos
- Gestionar para adaptarse al caos
Esto permite, sin entrar en los tecnicismos propios como waterfall o agile, definir dos tipos de estilos en las gestión de proyecto, el primero un enfoque más tradicional y el segundo un enfoque más adaptativo.
Estos dos estilos están muy bien reflejados en la clasificación que hizo en Davos hace un par de años John Maeda para describir las características del líder creativo (adaptativo) respecto al líder autoritario (tradicional).
Estas características, adaptadas al Project manager y traducidas quedarían de la forma siguiente:
Vale la pena recalcar que no existe una forma buena o mala, si no una forma adecuada o inadecuada. La realidad suele estar siempre a medio camino de posiciones extremas.
Bueno el comentario sobre ordenar y adaptar; pero, todos los proyectos implican una responsabilidad y desde el inicio hay que tener el sentimiento de que debemos completar los objetivos, lo que se traduce en buscar el EXITO del trabajo que queremos hacer. Existen buenas guías (PMBOK, APP, PRINCE, etc) para ordenar ideas, emprender proyectos y buscar el éxito de ellos.
Ignacio, tienes razón en lo referente a la estigmatización. La intención no es dar un tratamiento peyorativo al PM autoritario, el significado que se pretende dar es “el que tiene la autoridad” . En mi opinión, el PM autoritario es el enfoque más adecuado en ciertos tipo de proyectos o en ciertas fases de muchos proyectos.
Me encanta la reflexión. Lo único que aportaría es que, auqnue estoy de acuerdo en que no existe un sólo modo de dirigir proyectos y que, entre los extremos que presentas, se pueden tomar posiciiones intermedias, si llamamos tradicional=autoritario y creativo=adaptativo, con lso tiempos que corren, todos queremos ser lo segundo. Creo que es más neutra ladefinicón waterfall vs. agile aunque estemos estigmatizando la primera actualmente.
Gracias Luís por la aportación. La madurez del equipo es claramente otra de las dimensiones que afecta al estilo de dirección.
En mi opinión el estilo se debe adaptar a las circunstancias de cada proyecto. No es lo mismo un proyecto con un equipo maduro, donde puedes esperar buenos resultados de la autogestión, que un proyecto con un equipo poco experimentado donde, al menos al principio, el estilo deba ser más “intervencionista”.
Yo entiendo que el buen gestor de proyecto sabe identificar el entorno y adapta su estilo a esa situación.
Salvando las distancias es como me lo explicaron una vez en un seminario sobre liderazgo: no es lo mismo liderar a un grupo de personas en un incendio donde sólo tú sabes donde está la salida, que liderar (o facilitar) el tomar una decisión para elegir restaurante donde irte a cenar con tus viejos amigos.